En ellos, el tradicional redactado del contrato es sustituido por un código informático de tipo condicional, en el que las partes programan diferentes resultados para una variedad de posibilidades (“si pasa A, haz B; pero si se da C, ejecuta D”). Pero además, la identidad de las partes, las condiciones del pacto y las circunstancias del cumplimiento son acreditadas por una red de observadores imparciales. Esto es lo que se denomina registro distribuido y existen varias modalidades del mismo. La más conocida es la cadena bloques o blockchain.
Última actualización, a 21 de marzo de 2019.
Fuente: El País. Leer noticia aquí (31/12/2018)
Imagen: INCOTRANS® – International Business Advisors ©
«¿Cómo afectará el blockchain a la cadena de suministro en el transporte marítimo?» (26/12/2018)
Fuente: INCOTRANS® – International Business Advisors ©. Leer noticia aquí
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Fuente: Lawyer Press. Leer noticia aquí
Un ejemplo que permita visualizar el alcance de esta iniciativa sería la compraventa de un inmueble. La peculiaridad sería que la vivienda dispone de un mecanismo electrónico wifi que permite controlar los cierres, la electricidad y el agua mediante un código QR al que sólo tiene acceso el propietario. El smart contract, en este caso, verificaría la existencia de fondos en la cuenta del comprador y transferiría, de forma regular y automática, los pagos al vendedor. De acabarse el saldo, la tecnología avisaría al inquilino. Si no se soluciona el problema, se modificarían las claves de apertura y se detendrían los suministros para ese usuario. “Hay que recalcar que el contrato, como acuerdo de voluntades con consentimiento objeto-causa, siempre está por encima del software”, aclaran los letrados.
«Los ‘smart contracts’ no son tan perfectos como nos han vendido» (11/03/2018)
Fuente: El País. Leer noticia aquí
«El jurista ante el smart contract» (09/03/2018)
Fuente: Centro de Estudios Garrigues. Leer noticia aquí
«¿Qué son los ‘smart contracts’?» (09/01/2018)
Fuente: El País. Leer noticia aquí
Un contrato inteligente o smart contract es un código o protocolo informático que facilita verificar y hacer cumplir un contrato de manera automática. Aunque existe discusión acerca de la necesidad o no de acudir a agentes externos para ejecutar la condición prevista, lo que está claro es que aportarán agilidad al sector de los negocios. Estos contratos funcionan en la cadena de bloques y, a priori, no necesitan la intervención de las personas para comprobar y ejecutar su cumplimiento.